Poco a poco las ganas de verte se multiplican, cada día te echo más de menos.
Creo que esta situación de no estar juntos nos perjudica a los dos, a cada uno de una manera totalmente diferente pero esta claro que la impotencia que tenemos por no poder ser lo que antes eramos cada día se deja más entrever...  Tú lo pasas mal porque, creo, que en el fondo tienes muchísimo miedo a perderme, al saber que un día pueda que todo termine y nunca más vuelva a tener un nuevo comienzo... yo a esos miedo le sumo el deseo de tenerte igual que antes de ver que ya no eres completamente mío, el miedo de saber que cualquier día puedes cruzarte por la calle con la chica de tus sueños y a partir de ese momento ya no tenga ningún motivo para seguir luchando.

Durante todo este tiempo mi vida ha girado, y gira, en torno a ti, primero fue conocernos, después estar juntos y ahora luchar por lo que un día solo fue nuestro, pero a veces pienso que llevo demasiado tiempo luchando y que si ya no ha pasado nada no creo que pueda pasar, sin embargo otras veces pienso que tal vez deba intentarlo una vez más porque en ese intento esta la respuesta a todo, puede que la última llave sea la que abra la puerta... el camino es muy duro, y cada día pesa más pero jamás podría quedarme con la inquietud del qué hubiera pasado si lo hubiese intentado una vez más.

Luego está el problema de que me ilusiono demasiado, cualquier cosa buena fuera de lo normal que me digas, es suficiente para sumergirme en un mundo en el que todo es de la manera en que antes lo era... tengo demasiados miedos contigo, todas esas facilidades y motivos de confianza que antes teníamos ya no están y eso hace que el camino aún se haga más duro.                                                                                Hoy por hoy pocos motivos me das para que me siga importando todo esto, solo me quedan los recuerdos y el pensar que me has querido y tratado de una manera muy especial, que sabiendo como tú eres, me cuesta mucho pensar que vuelvas a querer de la misma manera a alguien que no sea yo.