Es mirarte a los ojos y ver que no eres el mismo de antes. Mirarte a lo ojos y ver que no tienes el mismo brillo, la misma alegría que antes me transmitías. Que quizás yo tenga parte de culpa pero quiero volver a ver como esos ojos derrochan la misma fuerza que antes. Nunca te digo nada, pero eso no quiere decir que ya no me fije en que no eres el mismo que antes. Que estás con tus amigos y quizás sean en los únicos momentos en los que estás más feliz, pero no quiero que dejes nunca de pensar que a mi me encantaría volver a regalarte esa alegría que te falta... para que seas completamente feliz a mi lado si es lo que quieres, y sino estaría dispuesta a hacer todo lo posible por darte esa felicidad que creo que necesitas. Que no me importa si es con otra que yo quiero lo mejor para ti aunque así yo tenga que perder lo que más quiero, que no me importa remover cielo y tierra para hacerte el niño más feliz del mundo porque si tú eres feliz yo soy feliz, y si tú sonríes yo sonrío por verte.